Comer hormigas culonas es una tradición en el departamento de Santander. Estos insectos salen de la tierra cada año alrededor de abril y los campesinos los atrapan para luego tostarlos. Su sabor fuerte y salado es tan importante para la gastronomía de Barichara, que en el municipio se les han hecho dos monumentos: uno está a la entrada y el otro, en la alcaldía municipal, junto a la plaza principal.